Verla entrar corriendo con su poder de niña abriéndose paso
en la vida como si le perteneciera
El aroma del té cuando se aquieta la noche y el tiempo cesa
Tus ojos serenos mirándome el alma
El honor de mi padre al final del camino
Mis manos danzando en garabatos de poesía
Momentos que me llevare
Como tantos otros me he llevado
Esa es nuestra verdadera riqueza, esos momentos por los que merece la pena abrir los ojos cada día a la vida y dar las gracias.
ResponderEliminarEste ha sido un momento en mi día. Gracias.
Besos de gofio.
La vida está llena de momentos eternos.
ResponderEliminar